Artritis
La osteoartritis, la artritis reumatoide y otras formas de artritis pueden causar dolor, inflamación y rigidez en la cadera debido al desgaste del cartílago articular.
Bursitis
La inflamación de la bolsa sinovial (bursa) que amortigua las articulaciones puede provocar dolor en la cadera, especialmente con actividades que implican flexión repetitiva o presión en la articulación.
Lesiones musculoesqueléticas
Las lesiones como distensiones musculares, desgarros del labrum de la cadera o fracturas pueden causar dolor agudo en la cadera y limitar la movilidad.
Tendinitis
La inflamación de los tendones que rodean la cadera, como el tendón del iliopsoas o el tendón del glúteo, puede provocar dolor en la cadera y la ingle.
Descanso y actividad modificada: Evita actividades que empeoren el dolor de cadera y permite que la articulación descanse. Considera cambiar a actividades de bajo impacto como nadar o andar en bicicleta.
Terapia física: Un fisioterapeuta puede recomendar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento específicos para mejorar la estabilidad y la movilidad de la cadera, así como técnicas de terapia manual para aliviar el dolor.
Medicamentos: Los analgésicos de venta libre, antiinflamatorios no esteroides (AINE) y medicamentos recetados pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación asociados con la cadera.
Inyecciones de corticosteroides: En casos de dolor de cadera persistente, tu médico puede recomendar inyecciones de corticosteroides en la articulación para reducir la inflamación y aliviar el malestar.
Cirugía: En casos graves de dolor de cadera que no responden a otros tratamientos, la cirugía puede ser necesaria para reparar o reemplazar la articulación dañada.
Opciones de tratamiento para el dolor de cadera
Descanso y actividad modificada
Evita actividades que empeoren el dolor de cadera y permite que la articulación descanse. Considera cambiar a actividades de bajo impacto como nadar o andar en bicicleta.
Terapia física
Un fisioterapeuta puede recomendar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento específicos para mejorar la estabilidad y la movilidad de la cadera, así como técnicas de terapia manual para aliviar el dolor.
Medicamentos
Los analgésicos de venta libre, antiinflamatorios no esteroides (AINE) y medicamentos recetados pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación asociados con la cadera.
Inyecciones de corticosteroides
En casos de dolor de cadera persistente, tu médico puede recomendar inyecciones de corticosteroides en la articulación para reducir la inflamación y aliviar el malestar.
Cirugía
En casos graves de dolor de cadera que no responden a otros tratamientos, la cirugía puede ser necesaria para reparar o reemplazar la articulación dañada.